El descenso no miente: el ocaso de Brown -

El Trico pagó caro sus falencias. ¿Por qué volvió a la B Metro?

Brown jugará en la B Metro. El bajo nivel futbolístico y los números alarmantes respaldan el triste desenlace. El elenco de Adrogué fue el equipo más goleado de la Primera Nacional (50 tantos recibidos) y el conjunto que menos marcó (solo 21). Además, registró la peor diferencia de gol (-29).

Sobre todo en la primera parte del torneo, el conjunto browniano mostró no estar acorde a la categoría. Sufrió duras goleadas ante Deportivo Morón (ya en el debut cayó 0-3), Defensores de Belgrano (0-3) y Chaco For Ever (0-3). El equipo hizo aguas por todos lados. La última línea careció de velocidad y solvencia. El mediocampo fue un paso para los rivales. Esto sumado a la inoperancia ofensiva. El mercado de pases no ayudó, muchos futbolistas inexpertos en la divisional.

Después del 0-4 sufrido ante Colón, donde se vio la impactante diferencia de nombres, Pablo Vico anunció su salida, un ciclo histórico de 15 años. El Bigotón cometió el error de apoyar a Franco Agüero. El arquero fue cuestionado por la hinchada: cometió errores determinantes. Por ejemplo, dos tantos sufridos ante el Sabalero.

El próximo DT, Juan Ignacio Brown, bancó a Franco Agüero. Sin embargo, después de 1-3 ante Gimnasia de Mendoza, el portero fue excluido. En los primeros partidos del «Tatita» y con Matías Wysocki en el arco, Brown mostró otra cara. El plantel intentó jugar al fútbol, pero sin eficacia ofensiva. Así pasaron los empates en cero con Nueva Chicago y Deportivo Morón. Sin goles es imposible ganar. El equipo volvió a las derrotas y hasta recibió una duro golpazo con Defensores de Belgrano (0-3). Juan Ignacio Brown armó las valijas y el club volvió a quedarse sin entrenador.

Jorge Vivaldo levantó la actitud grupal, pero no pudo marcar una gran diferencia futbolística, claramente heredó un plantel. El entrenador logró milagros y hasta sacó al equipo del descenso directo, algo impensado. Confió en Brandon López y el goleador marcó en los triunfos ante Rafaela, Defensores Unidos y Colón. El goleador no fue muy tenido en cuenta por los técnicos anteriores, pero el Flaco le dio minutos. El equipo incluso venció a Colón en el Cementerio de los Elefantes (2-0), más allá que el local generó suficientes jugadas para anotar.

No obstante, el equipo no aprovechó la localía cuando tuvo la oportunidad de alejarse. Ese fue el quiebre. Con garra, corazón y poco fútbol, empató en el minuto final ante Almirante Brown y Mitre, ambos partidos salieron 2 a 2. La Crema empezó a ganar y se acercó cada vez más. Al finalizar del campeonato, terminaron igualados y debieron jugar un desempate.

El partido definitorio fue una síntesis perfecta de la campaña Tricolor. En la etapa inicial, Brown se vio avasallado por su rival, muy similar al Brown que inició el torneo. La Crema hizo lo que quiso y se fue al vestuario 2-0. En el complemento, Brown se pareció más al equipo del Flaco Vivaldo, sin embargo, el fútbol no apareció. El descuento de Abel Masuero solo generó esperanza. El empuje está vez no alcanzó. Los milagros no siempre están a la vuelta de la esquina.

Más allá del saldo negativo, cabe mencionar la entrega de Matías Sproat y Nahuel Pereyra, dos jugadores identificados con la camiseta Tricolor. Pereyra no pudo jugar el último partido porque llegó a la quinta. También se destacaron Lucio Castillo y Brandon López. Un dato alarmante: de los 5 triunfos, solo 2 fueron de local. El grupo no supo hacerse fuerte en el Lorenzo Arandilla. El club de Adrogué deberá aprender de sus errores. Solo de esa forma volverá al Nacional.